Lima

Cómo elegirlos y conservarlos

El limón y la lima están disponibles en nuestros mercados todo el año. Los periodos de recolección en España del limón Primofiori van desde principios de octubre a finales de febrero. Los del Verna y Eureka, desde principios de febrero a finales de mayo.

Conviene elegir aquellos ejemplares que parezcan pesados para su tamaño, con la cáscara lisa, firme, brillante y de color verde intenso. Las pequeñas manchas marrones que pueden presentar en la cáscara, aunque les quite atractivo, no afectan al sabor. Se deben descartar las piezas blandas o desecadas.

Las limas deben manipularse con cuidado, ya que son bastante más delicadas que sus parientes los limones. Pierden agua fácilmente, por lo que se secan con rapidez, arrugándose y perdiendo su jugosidad. Además tienen tendencia a amarillear si se las expone a la luz intensa, al tiempo que su sabor se altera y pierden su acidez característica. A temperatura ambiente se mantienen durante una semana aproximadamente en buenas condiciones. Para lograr aumentar su periodo de conservación se las debe guardar en el frigorífico. El zumo y la cáscara también se pueden congelar, mientras que la cáscara desecada o confitada se ha de conservar en un ambiente fresco y seco.